21 agosto 2006

El Renacer de Endy Chávez

Endy Chávez no ha pegado los jonrones que ha machucado Carlos Beltrán (33), o remolcado compañeros como David Wright (86), o anotado carreras (95) y robado bases (49) como José Reyes, sin embargo, no es una exageración decir que los Mets no gozarían del mejor récord en las Grandes Ligas (71-46) sin las aportaciones del guardabosque venezolano.

El nativo de Valencia es el mortero que mantiene fuerte a la muralla de los Mets. Su bateó oportuno y versatilidad lo han hecho uno de los peloteros favoritos de Queens. Nadie en el club lucia mejor promedio de bateo con corredores en posicion de anotar que Chávez (.370).

Aunque el chamo, no era un pelotero regular, se encontraba cuarto en el equipo en carreras impulsadas en dichas situaciones (26). El veterano de seis temporadas en las mayores además se destacaba como el segundo mejor en el equipo y noveno mejor en el viejo circuito en asistencias desde los bosques (9). Chávez había acumulado su colección de fusilamientos velando los tres prados. Para eso existe la palabra equipo.

Es la contribución de cada uno de nosotros que le da la victoria al equipo, explicó Chávez a ESPNdeportes.com con mucha modestia. Con tanto talento junto, cualquiera puede ser el héroe en el equipo cualquier día.Chávez ha trabajado mucho para ser una pieza importante del renacimiento de los Mets. Durante el invierno empezó a cambiar su actitud en la caja de bateo. Estuve trabajando más que todo en mi ofensiva. Tratar de ser más selectivo. Batear los pitcheos que tengo que batear, no fallarlos. Eso es lo que he tratado de hacer; ser más consistente y me ha dado bastantes resultados, declaró el hombre que terminó segundo en promedio en la liga venezolana (.368) con los Navegantes de Magallanes.

Como explica su eficiencia de pegar tantos bateos oportunos? . Eso es parte del béisbol cuando eres consistente con la producción ofensiva. Me siento bien cuando ayudo al equipo. Trato de mantener la pelota en juego. Eso es lo que más vale en un partido. Yo sé que si pongo la pelota en juego algo va a pasar. El apoyo del manager de los Mets, Willie Randolph, también le ha beneficiado. Me ha puesto en una posición bastante buena ya que juego mi pelota bastante libre junto al patrón que él lleva. Hemos tenido muy buena comunicación, dijo Chávez.

Para el atleta de 28 años de edad, recobrar la confianza era vital ya que el 2005 fue un año difícil: comenzó la temporada en las menores en la sucursal de Triple A de los Nacionales; tuvo malos entendimientos con el manager principal de la organización, Frank Robinson; fue canjeado a los Phillies; y sufrió de su peor temporada en la gran carpa (.216 y apenas 116 turnos al bate). “Sí, cuando estaba con Washington me fue bastante difícil al principio, algo que no me esperaba”, confeso Chávez. Pero en el béisbol cualquier cosa puede pasar.

De verdad cuando me cambiaron a Filadelfia me sentí muy contento de haber salido de Washington. Los Filis me estaban dando otra oportunidad de estar en un equipo de Grandes Ligas. No tuve mucha acción pero me sentí muy a gusto con ellos. Se que no tuve muy buenos números allí. Pero también fue la primera vez que estaba en la banca y entraba de emergente y estaba un poco descontrolado de la mente. No sabia como ejercitar ese trabajo. Este año me preparé mucho en Venezuela me prepare mentalmente para lo que tenia que hacer aquí con los Mets”. Omar Minaya, el gerente general del equipo, nunca dudó que Chávez podía hacer el trabajo y espera que Chávez mejore aún más. “No me sorprende”, comentó el maestro albañil de los Mets. “Yo lo tenia por dos o tres años”, cuando Chávez y Minaya estaban en Montreal. “Él está bateando mejor que el año pasado; pero dos años atrás era mejor bateador que este año”.

Chávez está ayudando a darle vida a los pronósticos de Minaya. Su promedio en los primeros 15 días de agosto, el mes que más cansa a los big leaguers, ha sido fabuloso (.370). En los últimos cuatro juegos que ha jugado con su nombre en la alineación inicial estaba bateando .500 (siete hits en 14 turnos). En 14 de los últimos 16 desafíos que comenzó, su promedio de bateo era .407 (24 imparables en 59 turnos).Una de las razones porque Chávez sigue mejorando es su régimen de practica y de alzar pesas. “La vagancia no es buena. Hay que trabajar. Hay que estar pendiente a las cosas que hay que hacer y enfocado en lo uno quiere en el futuro”. Dicho futuro incluye un campeonato mundial y con los Mets ese futuro no parece estar muy lejano.

Por Will González.ESPNdeportes.com

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